Treinta oficiales de diversos grados están detenidos bajo investigación, sospechosos de estar involucrados en una conspiración para derrocar al presidente Nicolás Maduro, según informaron a ÚN fuentes de alto nivel en Miraflores.
Los servicios de inteligencia recibieron por vías militares, de varios oficiales, informaciones sobre “algo raro” que estarían preparando estos uniformados, por lo que desde algún tiempo se les hacía seguimiento a sus movimientos y conversaciones.
El intento desestabilizador debía ocurrir el jueves 20 de marzo, con operaciones aéreas y eventual ametrallamiento de soldados, y otros hechos planificados para provocar confusión y probables enfrentamientos. Sin embargo, la madeja de la conspiración no ha sido revelada, toda vez que continúa la actividad del consejo de investigación, pero se ha comprobado que algunos de los oficiales estaban en contacto con por lo menos un dirigente político de oposición.
propósito de estos vínculos, trascendió una real o supuesta conversación con un dirigente político, a quien le advierten que había una denuncia contra él y contra el coronel Rivero Lago. El político le comenta: “Tengo dos años trabajando con todo ese grupo, de los cuatro componentes”; que, de ser ciertos esos rumores, “toda la red que hemos armado en dos años, con la Guardia de Honor, el Ejército, la Marina y la Guardia Nacional, la habrían destruido hace tiempo”, y que “el riesgo lo corremos todos, ellos y nosotros; me he reunido con decenas de militares en todo el país, a escondidas, por supuesto, corriendo riesgos, como es lógico, y todo se puede venir abajo”. En relación con las intentonas de golpes, son recomendables las declaraciones que ayer ofreció el general Padrino López, jefe del Comando de Operaciones Estratégicas, a José Vicente Rangel en su programa en Televen. Son bien definitorias del rol de la Fuerza Armada, y de su compromiso con la Constitución y el pueblo.
Con información de: Últimas Noticias.
Se parte de Code Army!
Esta acción es solo para usuarios registrados